La tradición de despedir a las personas queridas con una ofrenda floral viene sucediendo desde la noche de los tiempos, se han encontrado ofrendas florales en yacimientos del paleolítico superior con dataciones que superan los 12.000 años de antigüedad.
Se deduce que los motivos por los que nuestros antepasados ofrecían al difunto flores, era sencillamente para rodear el cuerpo de un aroma agradable; hoy en día el arreglo floral a evolucionado mucho transformándose en todo un arte; creando ramos, centros, cruces y coronas verdaderamente espectaculares. Sabemos que la corona es la más demandada, pero encontrar las palabras adecuadas que acompañen esa corona y en esas circunstancias, es tarea para profesionales.
¿Qué flor elegir y por qué?
La reina de las flores funerarias es el Crisantemo. Se hizo con ese título porque era la flor más solicitada para el Día de Todos los Santos, el primero de Noviembre. El periodo de floración del Crisantemo es del octubre hasta diciembre y por tanto una de las mejores flores que coincida con esas fechas. Es muy común utilizarla como ofrenda a los difuntos en cementerios en memoria de los antepasados. Como tiene un momento de floración muy corto, apenas unos días, algunas personas veían en eso una metáfora de lo efímera de nuestra vida. Hoy en día, gracias a los trabajos en invernaderos, podemos disfrutar de esta bonita flor durante todo el año, incluso en variación de formas y colores. En el arte floral actual, se suelen acompañar de margaritas dado que pertenecen a la misma familia, simboliza la inocencia y la pureza. También puede simbolizar un nuevo comienzo.
Los claveles también forman parte de los clásicos de la ornamentación funeraria. Pueden expresar admiración por esa persona y la impronta que dejó en sus seres amados. Los claveles rojos simbolizan el amor, el orgullo y la admiración; los claveles rosas el amor de una mujer o de una madre; mientras que los claveles blancos inocencia y amor puro.
Se dice de los gladiolos que son la flor de la sinceridad. En la antigua Roma eran las flores que se les arrojaba a los gladiadores triunfantes, de ahí su nombre. Gladiolo simboliza la fuerza de carácter, la fidelidad y el honor. Se suele utilizar en las coronas debido a su elegancia de tallos.
Las rosas son una de las flores más aromáticas y de mayor elegancia, se han convertido en un imprescindible en todo sepelio. Si son de color blanco expresan inocencia, de color rosa aprecio y agradecimiento, rojas amor y respeto, estas se suelen depositar sobre el féretro, esto solo si la relación que nos une con el difunto es muy estrecha.
Los lirios son flores muy bellas que simbolizan los deseos de superación en momentos de pérdida y duelo. Suele acompañarse de azucenas y son de la misma familia, los lilium; de color blanco expresa pureza e inocencia. Es la flor con la que se suele representar a la virgen María en el cristianismo. Según las creencias mesopotámicas a la azucena se la relaciona con el mundo del más allá o de ultratumba, en el que consideran tiene poderes para renacer y volver a empezar.
En caso de duda, para no cometer ningún error, siempre recomendamos consultar con los profesionales. En Servicios Funerarios Hispanidad estaremos encantados de poder ayudaros.