- Si las circunstancias lo permiten, caso de una larga enfermedad o una edad muy avanzada, es conveniente poder decidir con antelación con que empresa funeraria deseamos realizar el servicio, pudiendo comparar calidad, atención recibida e instalaciones que nos pueden ofrecer.
- Aunque pueda parecer extraño o morboso el poder ir pensando en dedicatoria o arreglos florales, la ropa que deseamos poner a la persona fallecida nos ayudará a llevar mejor el momento de la despedida. Decidir en consenso con la familia si deseamos que el féretro mostrarlo abierto o cerrado.
- Debemos saber que entre las siguientes 24 y 48 horas del deceso el cuerpo debe inhumarse o incinerarse. En el primer caso si dispone de nicho o debemos adquirir uno y en la segunda opción debemos pensar qué hacer con las cenizas, custodiarlas en nuestra propia casa o depositarlas en un nicho.
- Pensar y decidir la persona que será la encargada de contactar con la empresa funeraria, debe ser la que mejor se encuentre de estado de ánimo para poder ser atendida por los profesionales y podemos satisfacer correctamente sus peticiones.
- Aunque parezca algo obvio, recordar que debemos tener localizado el DNI de la persona fallecida, así como una copia del mismo documento de la persona familiar que se hará responsable de firmar con la empresa funeraria la documentación legal necesaria.
- Conociendo las preferencias de la persona fallecida debemos valorar si celebrar una misa funeral o una ceremonia laica. En cualquier caso podemos escribir algún texto de homenaje al difunto o elección de su música favorita.
6 claves para la elección de la empresa funeraria
